Tíralo y no te desgastes

Ya no queremos reparar nada, mejor lo tiramos y conseguimos uno nuevo.

Me acuerdo cuando mi mamá llevaba sus zapatos a ponerles suela nueva con el zapatero, y cuando se los entregaban olían a pegamento y estaban bien pintaditos.

Me acuerdo del montón de hoyos de calcetín que mi mamá cocía y les daba segunda vida. Se sentía chistoso en el dedo, pero servían.

Me acuerdo que para comprar refresco tenías que llevar tu botella de vidrio y que esperábamos a que pasara la camioneta de la leche para que nos llenara la olla. Y que la comida para llevar te la llevabas en tus propios recipientes de plástico.

Me acuerdo de la tele que dejó de servir, que luego regresó y funcionó muy bien. Del control remoto que mi papá reparó con cinta adhesiva, y de la videocasetera que desatornillamos para sacar la cinta de película atorada y que con una buena soplada ya volvió a funcionar.

Rehusábamos y reparábamos todo lo que se rompía— con los técnicos o a la mexicana, como decimos.

Pero ahora ya no quiero reparar nada. Prefiero tirar el calcetín y comprar un nuevo par, deshacerme de los zapatos con agujeros y de la ropa rota. Cambiar el celular que ya va lento y tirar mi microondas que dejó de funcionar después de trece años. Ese micro calentó los biberones de mis hijas, luego sus papillas y recientemente sus palomitas para ver una peli en familia.

Dice Carlos que lo lleve a reparar, pero le respondí: ¿y si cuesta igual que uno nuevo, no sería mejor tirarlo y comprar uno nuevo?

Si cuesta igual para que quiero quedarme con el viejo. Mejor aprovecho y me consigo uno nuevo. De todos modos son para lo mismo, pero pues ya será algo nuevo.

¿Estaremos pensando lo mismo de las relaciones?

Para qué quiero reparar esta relación rota si puedo separarme y buscar una nueva persona. De todos modos son para lo mismo, pero pues ya será una persona nueva.

Es esta cultura de lo desechable que ya nos vendieron hace años y que ya compramos y adoptamos como la mejor solución para lo roto y para vivir rápido, porque ya sabes: YOLO.

Tíralo y compra otro, no te desgastes.

Simplifícate la vida: compra tu refresco sin llevar el envase, pide comida para llevar sin tener que cargar con tus tuppers y cambia ese celular del año pasado. ¿La relación no va bien?, no te compliques en tratar de curar las heridas, dale vuelta de hoja a tu vida y avanza lo más rápido que puedas, deja atrás a esa persona y renuévate a ti misma, ya encontrarás a otra persona que te cuide mejor.

Por lo pronto en mi casa vamos a estrenar microondas.

Fin de párrafo.

2 comentarios en «Tíralo y no te desgastes»

  1. Buena reflexión. Definitivamente la industria nos ha hecho entrar en ese pozo sin fondo de consumismo causado por la obsolescencia programada. En la medida que podamos tratemos de bajar la velocidad y sobre todo echarle más ganas a nuestras relaciones humanas. Saludos!

La cajita es para motivarte a comentar algo